Capítulo 34 | Me voy me vivo yendo

El Bolsón, 1 de mayo de 2006

Bolsón me voy y me llevo tus perfumes

tus noches frías no tan frías

tus verdes mutando hacia amarillos y luego a rojos

tu lluvia, que no molesta por lo que cae pero si por lo que se acumula

Me llevo tus nueces lloviendo

tus nubes de azúcar decorando el Piltri

tus ríos mansos y tus ríos bravíos

tus hojas secas guiándome el camino

Me llevo tu gente y tus amigos

tus locuras y alucinaciones

tus saludos mentales

tu apacible ritmo de otoño

Me llevo tus calles silenciosas

tus charcos y piedras

mis pies mojados

tu tierra apaciguada por el agua

Me llevo tus saludos

tus besos y abrazos

tus arrumacos de amanecer

Me voy Bolsón

pero te llevo dentro mío

como cada vez que me voy

Me voy

pero cuando?

si siempre estoy llegando!

 

Siempre hay un monopolvo
para una monorgásmica.

Natalia Lorea

Capítulo 33 | Mis últimos días en La Emilia

Lago Puelo, 1 de mayo de 2006

 

Paso mis tres últimos días en la chacra La Emilia.

 

Lo de siempre. Descanso. Charla y más charla con Mabel. Actividades con Rodrigo, en general relacionadas a arreglar una bici o manualidades varias. Lectura. Ocio y placer. Orgasmos gastronómicos por doquier. Decanto y asiento todo lo que viví en este mes. Dejo manso que las sensaciones se acomoden solas mientras yo retozo, como y medito. Me voy acomodando a esta nueva vida. La primera etapa está cumplida y el balance es más que positivo. Estoy feliz de la relación que logre con la gente del servicio. Con todos. Con cada uno. Feliz de haber visto y vivido todo lo que viví en relación a la Salud Mental. Como la gente se acopló conmigo. Lo bien que me trataron. Lo mucho que me enseñaron. Me llevo una experiencia increíble. No cualquiera puede ver este tipo de medicina desde la mismísima cocina. 

 

Me levanto no se bien a que hora pero parece temprano. En la Emilia no suelo mirar el reloj. Hace mucho frío pero el sol esta solo en el cielo. Mabel toma mate de cara al sol apoyada en la cámara frigorífica que esta mas blanca que nunca. Mabel toma mate con limón. Fumamos. Charlamos. Mateamos. Nos emocionamos, siempre nos emocionamos. Hablamos de tantas cosas, pero siempre tan trascendentales, tan esclarecedoras. La charla me atrapa de tal modo que aunque me estoy meando aguanto estoicamente.

En mi último día leo una gacetita histórica que me llamó la atención. Leí que se toma como la fecha fundacional de El Bolsón al 28 de enero de 1926, oportunidad en que se reúnen los lugareños en la casa de Cándido Azcona, resolviendo formar la primera organización político-administrativa, y firmando el acta constitutiva de la Comisión de Fomento de El Bolsón, resultando electo Presidente Pedro Pascual Ponce, argentino, nacido en San Luis. 

80 años después, Doctor Javier Gallo, rotante, dice:

adiós El Bolsón.

Próxima Estación: San Luis.

Capítulo 32 | Una de vaqueros

El Bolsón, 30 de Abril de 2006

Otros extranjeros famosos que poblaron esta zona son los famosos bandoleros norteamericanos Sundance Kid y Butch Cassidy, que vivieron durante años como ganaderos en la zona de Cholila, junto con la mujer del último, una hermosa criminal llamada Etta Place. Allí formaron una sociedad ganadera y lograron ganarse la simpatía de sus vecinos, pero pronto sobrevino el aburrimiento. 

Y aquí las versiones discrepan. Algunos historiadores señalan que Butch y Sundance robaron el Banco Tarapacá y el Argentino Limitado en Río Gallegos en febrero de 1903, aunque otros libros establecen la fecha de estos asaltos en 1905 y 1907. Según el profesor de historia Marcelo Gavirati, el trío nunca abandonó Cholila durante esa época.

Cuando llegó la orden de captura, el comisario local Edward Humpreys se resistió a detener a sus vecinos. 

No sólo es amigo de los dos hombres;
está secretamente enamorado de Etta Place.


Debido a los rumores, el trío desaparece, y no se vuelve a saber de ellos hasta el 19 de diciembre de 1905, cuando se produjo un atraco en el Banco Nación de Villa Mercedes (San Luis) de donde Butch Cassidy y Sundance Kid (junto con otros dos pistoleros) se habrían llevado U$S 137.000, tras lo cual volvieron a desaparecer sin dejar rastros hasta 1908, cuando mueren acribillados por el Ejército Boliviano, en San Vicente. Etta Place, curiosamente, muere en 1922 tras un poco claro tiroteo con el temible Mayor prusiano Mateo Gebhart, el mismo que había disuelto la fallida República del Bolsón.

Capítulo 31 | Elogio al viajar

El Bolsón, 29 de Abril de 2006

Viajar es la escuela de la vida.

Viajar es andar con lo que uno puede cargar encima.

Viajar te enseña a arreglártelas con poco y nada.

Viajar es conocer infinitas realidades que te sacan del ombliguismo.

Viajar te hermana con tu compañero de aventura.

Viajar te hace darte cuenta que con vos o sin vos la vida de los demás sigue su curso natural.

Viajar te ubica en la góndola.

Viajar te despabila.

Viajar te hace ver desde otro ángulo, con otra perspectiva.

Viajar es mirar con mucha mas atención cada cosa.

Viajar es escuchar, todo el tiempo escuchar.

Viajar es saborear con placer comidas nuevas.

Viajar es encontrar impagables pequeñas cosas.

Viajar potencia las sensaciones todas.

Viajar es disfrutar de estar en una estación de servicio en el medio de la nada.

Viajar es hacer dedo 10 horas sin que te levante nadie, pero cuando te levantan sentirse el rey de la galaxia.

Viajar es conocer gente que viaja y siente como uno.

Viajar es llegar a una ciudad de noche en la caja de una camioneta y emocionarte por ver las luces.

Viajar te llena el alma.

Viajar es conocer nuevas estrellas.

Viajar es estar en la selva amazónica charlando con un noruego que anda con una peruana y que se te acerque una italiana a pedirte fuego para prender un jamaiquino.

Viajar es encontrarte en Lisboa con un tipo que nunca viste y vive a 2 cuadras de tu casa de San Telmo.

Viajar es romper la rutina asesina.

Viajar te pone en orbita.

Viajar es disfrutar una ducha caliente como nunca te pasó.

Viajar es escuchar música al borde de una ruta y cantar feliz.

Viajar te acerca a la lectura.

Viajar te enseña todas las materia de la escuela, pero de un modo fácil y divertido.

Viajar es crecer mucho en poco tiempo.

Viajar es irse uno y volver otro.

Capítulo 30 | Salida al Manso

El Bolsón, 28 de Abril de 2006

Salimos con Mauricio en colectivo hacia Los Repollos desde donde comenzaremos el descenso del Río Manso. Vamos en el marco de las “salidas rurales” que realiza el servicio para ver a los usuarios que viven en esta zona para ver que pasa por el Manso.

Debido al amplio sector de su cuenca, su variada conformación y la cantidad de lagos de los que ingresa y egresa, conviene dividir al Río Manso en tres sectores: Manso superior, Manso medio y Manso inferior.

El Manso Superior mide 17 Km. y se extiende desde su nacimiento al pie del Cerro Tronador hasta la desembocadura en el extremo Noroeste del brazo Tronador del Lago Mascardi. Cuando llegamos al puesto de salud del Manso superior, nos recibe una enfermera bastante quema coco, de esas personas que te hablan te hablan te hablan. Mate con torta frita. Emprendemos el recorrido por algunas casas de la zona. Las historias que me cuenta Mauri son escalofriantes. Una que el punto con el que andaba se le metía en la noche borracho en la casa y la obligaba a tener relaciones sexuales con los pibes de ella dentro de la casilla. Claro, los pibes tienen problemas en la escuela… como para no. Otra que la faja no se quien. Otro que se toma hasta el agua del radiador y se pone violento como pocos. Muchos pibes van a la escuela de acá. Otros muchos van a la del manso medio que es una escuela hogar y permanecen pupilos de lunes a viernes. Realmente llevo dentro mío desde pequeño un pavor terrible a la idea de ser pupilo en una escuela. Imagino la tristeza de estar solo y lejos de casa siendo un niño. Es por eso que especialmente estos chicos me parten el alma. Historias y más historias de este tipo abundan por aquí. Tristes cuestiones comunes en este tipo de zonas donde la miseria, la falta de educación, el alcohol y la poca esperanza son las cuatro patas de la mesa.

 

El día está hermoso, horas más tarde partimos en ambulancia hacia la escuela hogar del Manso medio, que mide 31 Km. (poquito menos del doble del Manso superior) y se extiende desde su salida en el sector inferior del Lago Mascardi, hasta su ingreso en la cabecera Oeste del Lago Steffen. El paisaje de esta zona es increíble. Montañas nevadas de fondo. Cielo celeste intenso. Nubes blancas como la leche entera. Ripio y árboles. Evoco los veranos de mi adolescencia acampando con mis primos en el Lago Steffen. El ambulanciero esta jocoso y tira mucho chiste, demasiado chiste.

En la escuela nos entrevistamos con la directora de la escuela quien nos manifiesta algunas preocupaciones en ciertos niños. Jovencitas de 14 años que no se que carajo con las relaciones sexuales -supongo a que se refiere a que ya empezaron a coger-. Un niño que esta de pupilo que se caga todos los días en sus pantalones -se me estruja el alma-. Otros que bardean y no prestan atención -¿y eso que tendrá de anormal? pienso yo mientras la directora sigue hablando a mil por hora.

Emprendemos el camino de regreso. Caminamos desde el puesto del Manso superior hasta la ruta. Vamos en cuero y con las remeras en la cabeza bajo un sol cargado. Reflexionamos con Mauri: son de esas tardes para hacerse un asadito mientras arrancas el fuego tomando un vinito y fumando uno al calor de las brasas: y ya de pensarlo nos da el hambre.

Esperamos mucho tiempo un colectivo Vía Bariloche que nos lleve de regreso a Bolsón. 

La espera en la ruta es algo muy característico en mis viajes. Siempre hay que hacer tiempo en la ruta por alguna causa. Y cuando la espera se hace larga uno busca juegos distractores y delirios de ocasión. Puntería con piedritas. Reflexiones sobre estar varado en la ruta como metáfora de la vida. Lecturas con un ojo en el libro y otro en la ruta escudriñando un posible auto que nos lleve a destino. Excursiones cortas de algunos metros.

Mauri me cuenta de su vida y yo de la mía, en la ruta uno se hace confidente con el compañero.

De regreso en el pueblo Mauri me comenta que hoy a la noche van a hacer cerveza casera con Vero, su compañera. Me invita y acepto gustoso. Comemos tartas variadas. Hacen la cerveza casera*. El proceso es largo y entretenido. El clima de la familia es encantador. Los niños juegan buscando pasar el limite de lo permitido sutilmente, buscando el reto leve como para llamar la atención mas no para ser reprendidos con una regia cagada a pedos. La niña es la menor. El niño es el mayor. Es tarde ya para los niños y son enviados a dormir. Ellos elevan quejas resignadas hacia las autoridades. No son escuchadas. Esta vez las autoridades ganan. Charlo con las autoridades y me entretengo mucho con las historias del pasado de estudiantes de La Plata. Nos reímos mucho y salimos a colar el brebaje de la cerveza. Entramos y ya se esta armando, la sobremesa. Salen al ruedo algunas cervezas artesanales de una cosecha anterior. Ya nos reímos mas que antes, bastante mas que antes. Recordamos viejas propagandas del pasado. ¿Porque le habrán puesto caballos? Hay datos que se pierden entre los intrincados laberintos neuronales. Luego aparecen. Luego desaparecen. El tiempo pasa mas lento pero es mas agradable que lo habitual. Mauri me quiere pedir un remis porque su casa se encuentra en un barrio alejado y nuevo. En la remisería no tienen ni puta idea de como llegar. A Mauri le esta costando mucho explicarle y pone cara de que le cuesta mucho hacer lo que esta haciendo.

Me vuelvo en remis hasta mi cueva. El auto parece una lancha navegando por el delta del Amazonas. No pronuncio palabra en todo el viaje y disfruto del paseo hundido en la butaca. En la radio suena Shakira. Como le gusta la radio hitera al remisero, reflexiono subitamente y pienso que es una idea brillante lo que se me acaba de ocurrir. segundos despues mi idea se desvanece al ver como se mueve el osito que cuelga del espejito retrovisor.

 

* Receta para 50 litros de Cerveza Mauri Casera Rubia

1) Hervir 50 litros de agua y luego dejar enfriar

2) Prepara la sopa: 8 litros de agua + 2,5 Kg. de azúcar + 2,5 Kg. de malta rubia

3) Al momento del hervor agregar la mitad del lúpulo (se usa entre 1 a 1,5 gr./litro de agua)

4) A los 30 minutos del hervor agregar la otra mitad del lúpulo

5) A los 50 minutos del hervor agregar 2 cucharadas soperas de agar agar

6) Juntar los 5 litros de agua con la sopa y cuando esta tibia agregar 30 gr. de levadura (que previamente fueron

disueltos en agua tibia)

7) Poner en un tacho cerrado con válvula de escape para el gas de 7 a 10 días

8) Antes de envasar poner una cucharada de azúcar en cada botella y dejar reposar de 1 a 2 semanas

9) Beber sin moderación. Prohibida su venta… deberá regalarse.

NOTA PARA EL LECTOR: No lo intenten en sus casas o háganse cargo del riesgo. Realmente no puedo dar fe si las notas tomadas en cuanto a la receta son correctas. Lo lamento tanto.